Los habitantes de las calles de Gran Vista y Muhlberg han comenzado a cortar los fines de semana el acceso a las antiguas fortificaciones reconvertidas en miradores
Los vecinos de las calles de Gran Vista y Muhlberg del barrio de El Carmel no pueden más. A los constantes problemas que sacuden ambas vías, entre los que se encuentran el ruido, las fiestas ilegales, las peleas, la degradación del pavimento y el aparcamiento se ha sumado el embotellamiento de la calzada por culpa de la gran afluencia de taxis y VTC que transportan a los turistas a los búnkeres de Barcelona.